La víspera el ministro de Recursos Minerales, Petróleo y Gas de Angola, Diamantino Azevedo, y el titular de Hidrocarburos de la República Democrática del Congo, Aimé Sakombi, firmaron un convenio con nuevos términos para el desarrollo del Bloque 14, que cruza la frontera marítima entre ambos países.
El bloque de aguas profundas, tiene una capacidad de 3,29 millones de barriles de petróleo al año y es operado por la filial local de Chevron, Cabinda Gulf Oil Company, junto con sus socios Eni, Etu Energias y la petrolera angoleña Sonangol.
En la inauguración de la conferencia, efectuada el miércoles, el presidente de Angola, João Lourenço, afirmó que el país mantiene la aspiración de ser un productor competitivo de hidrocarburos y contribuir a la seguridad energética a nivel global.
El mandatario defendió el estricto cumplimiento de la ley que promueve la contratación, la integración, la formación y el desarrollo profesional del personal del sector.
De igual forma, exhortó a la inserción de empresas angoleñas para la prestación de servicios y el suministro de bienes de producción nacional en esta rama; así como a brindar especial atención a los jóvenes graduados, creando las condiciones para su inserción en el mercado laboral.
El ministro Diamantino Azevedo, por su parte, defendió una agenda común entre países productores y consumidores de petróleo para garantizar una transición energética justa y debidamente programada.
Se refirió a la relevancia del encuentro en un momento en que la situación geopolítica y macroeconómica internacional crea numerosas distorsiones en los mercados, y añadió que el sector de los hidrocarburos también enfrenta limitaciones como la dificultad para obtener financiación para proyectos extractivos.
Azevedo señaló que actualmente se priorizan las inversiones en el área de las energías renovables en detrimento de las inversiones en la exploración y el desarrollo de yacimientos petrolíferos.
Al respecto, consideró que la transición energética justa debe salvaguardar la utilización de todas las fuentes de energía existentes, dando posibilidad a los países productores de continuar desarrollando sus recursos para garantizar una reposición sostenible de reservas y la continuidad de la producción.
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