En la sesión convocada para continuar con la interpelación del ministro de Gobernación Francisco Jiménez, la moción presentada por los diputados Nery Ramos, Jorge Villagrán y Karina Paz recibió 126 votos a favor.
De acuerdo con lo establecido, cada magistrado necesita obtener en el Parlamento al menos 81 respaldos y los legisladores deberán fundamentar su decisión.
El magistrado que obtenga la mayor cantidad a favor ocupará la primera vocalía de la CSJ, un puesto calificado de clave en el Organismo Judicial, pues ante la ausencia de un presidente es este quien ocupa el alto cargo de manera interina.
Además de esta elección, el Congreso también debe definir antes del 13 de octubre a 156 magistrados titulares para Corte de Apelaciones y 104 suplentes.
Desde la mañana autoridades indígenas se presentaron frente al Congreso para exigir a los diputados que realicen una votación nominal, pública y transparente.
Además, que la elección de magistrados se haga sin secretos, y que no se elijan a aquellos candidatos que buscan nuevamente integrar ese tribunal.
Pidieron que eviten a candidatos que tengan vínculos políticos y que no se elijan a las personas que aparecieron en la lista de candidatos para la elección 2019-2024 del caso Comisiones Paralelas.
El presidente del país, Bernardo Arévalo, exhortó el lunes pasado a los diputados del Congreso continuar con el espíritu de cambio que Guatemala necesita.
Mediante su perfil en la red social X, calificó de inmensos los retos; sin embargo, el papel de observancia y fiscalización social está siendo fundamental para que la minoría corrupta saque las manos del sistema, subrayó.
El proceso de nombrar los magistrados para ambas Cortes siempre estuvo arreglado en Guatemala por grupos de poder político y económico que influyeron para colocar a jueces afines, advirtieron analistas locales.
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