En enero y febrero del año pasado, 13 individuos fueron juzgados por realizar esos planes en la sureña localidad de Barjols, juicio en el cual cuatro recibieron condenas y nueve quedaron absueltos.
La apelación involucra a tres de los sentenciados y a ocho de los que salieron sin cargos, reclamación presentada en estos últimos casos por la Fiscalía Nacional Antiterrorista, inconforme con el dictamen de la primera instancia.
Según la defensa de los acusados, en el proceso se “confundió” el malestar social de los encartados con el terrorismo, lo cual calificó de “fiasco judicial”.
Por su parte, la Fiscalía Nacional Antiterrorista expuso la intención de las personas juzgadas entonces de atacar a Macron, a mezquitas y a migrantes, a partir de conversaciones telefónicas, mensajes en Internet y reuniones de corte paramilitar.
Ninguna de las alegadas acciones se produjo, sin embargo, durante el arresto de uno de los individuos se ocuparon armas y municiones.
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