Durante una alocución televisiva, la mandataria recordó que el fenómeno es de categoría cinco y lo acompañan aguaceros intensos, tormentas eléctricas y fuertes vientos, lo cual pueden desencadenar desastres de gran magnitud y provocar pérdidas de vidas humanas.
“Quienes se encuentran en lugares bajos es mejor que vayan a los albergues, que ya están dispuestos”, acotó la gobernante, al informar que varias instituciones gubernamentales trabajan en las labores preventivas.
México activó medidas de contingencia en Campeche, Quintana Roo y Yucatán ante el fortalecimiento y proximidad de Milton, pues los pronósticos apuntan a que puede impactar entre las costas de Celestún y Progreso.
Entre las disposiciones en marcha figuran la suspensión de las actividades no esenciales, la interrupción del transporte público y la ley seca.
Además, las autoridades urgen a la población a mantenerse informados y atentos a los avisos, evitar las imprudencias y velar por sus vidas.
Lugares como Yucatán decretaron mantener la coordinación interinstitucional entre los tres niveles de gobierno y el Comité Estatal de Protección Civil comenzó con la evacuación en la zona costera, principalmente, porque se esperan olas de hasta ocho metros de altura y acumulados de 250 milímetros de lluvia.
México estará bajo la influencia del huracán Milton hasta el miércoles y sus precipitaciones podrían ocasionar el aumento en los ríos y arroyos con las consecuentes inundaciones, deslaves y daños en los tendidos eléctricos, las casas con techos ligeros y la vegetación.
La actual circulación de dos huracanes por el Atlántico y otro por el Caribe resulta una situación poco común durante una temporada ciclónica y la última vez que sucedió fue en 2017.
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