La disolución de la cámara baja de 465 miembros se produjo apenas ocho días después de que Ishiba asumiera el cargo, lo que la convirtió en la más rápida del Japón de posguerra.
La campaña oficial está programada para comenzar el venidero 15 de octubre para los primeros comicios a la cámara baja desde 2021.
De acuerdo con analistas políticos, la atención se centra en si el gobernante Partido Liberal Democrático (PDL), encabezado por Ishiba, puede mantener su mayoría en la cámara más poderosa de la Dieta, en busca de un voto de confianza antes de iniciar la reforma del partido, manchado por escándalos políticos y económicos.
El objetivo de estas elecciones es obtener la aprobación pública de nuestros esfuerzos por cambiar fundamentalmente la dirección de la sociedad japonesa, declaró el primer ministro en conferencia de prensa.
El jefe de gobierno reconoció que los vientos soplan en contra del partido, pero confiaba en que el PDL junto con su socio de coalición menor, el Komeito, obtendrían la mayoría de los 465 escaños en juego en las próximas elecciones.
La coalición tenía más de 280 escaños: alrededor de 250 para el PDL y unos 30 para el Komeito, muy por encima del umbral de la mayoría de 233; mientras tanto, el principal partido de la oposición, el Partido Democrático Constitucional de Japón, tenía casi 100 escaños.
mem/nvo
