Ignacio Rey, presidente de FIPCA, estimó que la Ley de Cine constituye un pilar fundamental para el desarrollo cultural y económico del país, y su posible eliminación representará un grave retroceso para la industria.
Sus afirmaciones tienen lugar después de que el Gobierno de Luis Abinader anunció esta semana la derogación de los incentivos establecidos en la referida normativa por considerar que ya no son necesarios.
Rey indicó que esa Ley representa un impulso al fortalecimiento de la identidad nacional y la promoción del talento local.
Advirtió que la eliminación de estos beneficios significaría no solo la destrucción de la industria, sino también la pérdida de numerosos empleos y la quiebra de cientos de empresas que brindan servicios a la producción cinematográfica.
Al referirse a los logros del sector desde la implementación de la Ley de Cine mencionó el fomento de la producción local, la generación de empleos y la promoción de talentos en la actuación, dirección y producción.
También citó el incremento en la inversión, lo que ha permitido, dijo, mejorar la infraestructura y los recursos para la producción.
La propuesta del Gobierno de eliminar los incentivos fiscales de la Ley de Cine ha encontrado el rechazo de los cineastas, así como de gestores que no forman parte de la Adocine.
Para el cineasta Pablo Chea citado por Diario Libre, la industria desaparecerá si le quitan los incentivos porque requiere actualizaciones constantes en los equipos, así como la preparación de sus operadores.
Por su parte, la actriz Cheddy García rechazo cualquier atentado contra una disposición creada para dar grandes oportunidades y fuentes de empleo.
Omar de la Cruz, director del Festival de Cine Global y tesorero de Adocine, dijo que van a priorizar el diálogo, pero si tienen que ir a protestar a las calles, lo harán.
ro/mpv