La víspera, el FSUN realizó un paro de 24 horas para rechazar el veto del presidente argentino, Javier Milei, a una ley de financiamiento universitario, el cual fue ratificado por la Cámara de Diputados.
Durante la jornada, los alumnos y trabajadores participaron en clases abiertas, asambleas, abrazos simbólicos, marchas y cacerolazos, entre otras iniciativas, en varias provincias del país donde numerosas facultades permanecen tomadas.
Decenas de escuelas y centros de altos estudios en esta capital, la provincia de Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Jujuy, Tucumán, Salta, Río Negro, San Juan, San Luis y otros territorios fueron escenarios de las manifestaciones contra la medida del Ejecutivo.
En un comunicado, el FSUN informó su decisión de fortalecer la lucha “con un horizonte de disputa con el gobierno nacional que nos privó de la herramienta de la Ley de Financiamiento y de una paritaria (negociación) que reconozca la especificidad de los trabajadores del sector y ofrezca una solución a la grave situación salarial».
Además, precisó que el martes 15 tendrá lugar una reunión con el Consejo Interuniversitario Nacional y los estudiantes para sostener la unidad del frente y acordar un marco de acción programático.
Para el jueves 17 está previsto otro paro de 24 horas y el lunes 21 comenzará una semana de lucha.
Consideramos fundamental una acción de federalización del conflicto universitario por regiones, apunta el texto que aboga por la celebración de una tercera marcha en defensa de la universidad pública.
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