Por séptimo día consecutivo, los militares impidieron la entrada de medicamentos y alimentos al campamento, como parte de la guerra de exterminio y castigo colectivo contra los residentes por negarse a abandonar sus hogares.
De acuerdo con el canal panárabe Al Mayadeen, el ejército israelí demolió edificios residenciales en el oeste de la zona y paramédicos de la Media Luna Roja trasladaron a varios heridos al hospital Kamal Adwan tras un ataque aéreo contra una vivienda cerca de la mezquita Al-Ihsan en Jabalia.
La administración del hospital Kamal Adwan aseguró que no habrá evacuación de la institución sanitaria, y “nos centramos en garantizar el ingreso de combustible y fortalecer el sistema sanitario en el norte».
Informó que algunos pacientes, incluidos niños, fueron trasladados a centros médicos en la ciudad de Gaza para aliviar la presión sobre las instalaciones sanitarias del norte.
En su cuenta de X, el director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, denunció que Israel denegó dos misiones de ayuda y reclamó suspender las órdenes de evacuación y proteger los hospitales.
La autoridad instó al gobierno de Tel Aviv a facilitar las misiones humanitarias y trabajar por un alto el fuego.
Todas las personas atrapadas en este conflicto necesitan paz, escribió el titular de la OMS.
En el centro de la Franja, tres personas, entre ellas una mujer, murieron en la madrugada en un ataque israelí contra una casa en Deir al-Balah y contra un grupo de civiles en el campamento de refugiados de Maghazi, informó la agencia WAFA.
Al menos cuatro civiles sufrieron heridas en el bombardeo a una vivienda en el campamento de refugiados de Al-Nuseirat y en paralelo, dispararon al barrio de Al-Zaytoun, en el sureste de Gaza.
La persistente agresión israelí contra la Franja de Gaza, por tierra, mar y aire, desde el 8 de octubre de 2023, provocó hasta ahora la muerte de más de 42 mil palestinos y cerca de 98 mil heridos, la mayoría de ellos niños y mujeres.
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