El libelo acusatorio, presentado por la Democracia Cristiana y partidos del oficialismo, fue adoptado por 131 votos a favor, una abstención y ninguno en contra.
Vivanco fue removida del máximo tribunal tras revelarse una serie de chats donde le pide ayuda para su ratificación en el cargo al influyente penalista Luis Hermosilla, hoy en prisión preventiva por lavado de activos, sobornos y delitos contra el fisco.
A cambio de esto, la magistrada le hizo numerosos favores a Hermosilla, desde intentar vetar designaciones de jueces, hasta apoyar el ascenso de otros, además de compartir información por causas de interés, lo cual califica como tráfico de influencias.
La acusación pasará ahora al Senado, donde Vivanco enfrenta una primera Acción Constitucional en conjunto con el juez de la Corte Suprema Sergio Muñoz.
Ambas buscan inhabilitarla para cargos públicos por un período de cinco años.
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