“La reforma del Consejo de Seguridad es vital para los esfuerzos mundiales encaminados a promover la paz y la estabilidad”, dijo el mandatario, quien consideró que esa institución ha fracasado en la ejecución de su mandato debido a intereses nacionales estrechos y a la búsqueda de una mayor influencia geopolítica.
En los últimos años, el Consejo de Seguridad no ha podido prevenir ni resolver varios conflictos perjudiciales, añadió, y refirió que estas deficiencias tienen un impacto desastroso en el continente africano y en el Sur Global, que a menudo sufren los efectos sociales y económicos de los conflictos en otras regiones.
“Seguimos pidiendo la reforma urgente del Consejo de Seguridad, basada en la Posición Común Africana, que pide dos puestos permanentes y cinco puestos no permanentes para África”, explicó a los parlamentarios.
Detalló que también se solicita la abolición del veto, pero mientras esta prerrogativa exista, consideran que debe ser un privilegio que debe extenderse a todos los nuevos miembros permanentes.
“Los Estados miembros africanos representan una cuarta parte de los 193 que integran las Naciones Unidas. Sin embargo, ningún país africano tiene un asiento permanente en la mesa donde se toman decisiones sobre el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales”, significó.
Señaló que esto es especialmente preocupante cuando muchos de los temas de la agenda de esa estructura se relacionan con el continente africano.
Todos estos puntos fueron expuestos en la 79 Asamblea General de las Naciones Unidas, precisó Ramaphosa, quien también explicó al Parlamento sobre el respaldo sudafricano al Pacto para el Futuro.
Este jueves el presidente de Sudáfrica actualizó a los parlamentarios, además, sobre el funcionamiento del Gobierno de Unidad Nacional y la lucha contra el crimen organizado, entre otros asuntos.
También respondió preguntas de los integrantes del Legislativo.
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