Según informó la agencia estatal de noticias ACNC, el “bombardeo con basura ideológica” se efectuó sobre varias comunas de las provincias de Pyonggang y Kangwon, en la línea fronteriza entre ambos países.
Los órganos de seguridad de las respectivas localidades bloquearon las zonas donde se hallaron las basuras y están examinándolas para su posterior eliminación mediante quemas, indicó la nota.
El pasado 10 de mayo, unos 20 globos procedentes de Corea del Sur irrumpieron en el espacio aéreo de la RPDC con unos 300 mil panfletos con llamados a desestabilizar el Estado y contenidos insultantes al secretario general del Partido del Trabajo y presidente del Comité de Asuntos Estatales, Kim Jong Un.
Esa es una práctica de años que el sistema de justicia surcoreano no impidió so pretexto de la democracia y la libertad de expresión.
Unos días después del primer incidente, la vicejefa del Departamento de Comunicación y Propaganda del Partido del Trabajo, Kim Yo Jong, dijo que la RPDC respondería a cada uno de esos actos “de la misma manera y en una cantidad multiplicada”, advertencia que después se cumplió.
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