En conferencia de prensa, el titular destacó que la principal causa de los daños en el sector es la falta de combustible, debido al bloqueo impuesto por Estados Unidos a la isla, hace más de seis décadas.
Recordó que el pasado viernes, el sistema sufrió una caída total por el debilitamiento del Sistema Electroenergético Nacional (SEN). «Veníamos dando apagones de muchas horas, sobre todo por la falta de combustible», acotó.
De la O Levy añadió que en ese momento había 900 megawattss que estaban fuera en la generación móvil distribuida por no tener combustible y solo estaban generando las termoeléctricas y las plantas Energás.
Precisó que cualquier central termoeléctrica que saliera de manera imprevista ese día podría haber causado la misma reacción.
El ministro explicó que luego de la caída del sistema, uno de los primeros pasos es generar electricidad, pues «las termoeléctricas no arrancan solas» y para tal propósito —dijo— se hizo un diseño a partir del protocolo con las unidades de Energás.
«Es una operación extremadamente compleja porque hay muchas variables que inciden; hay que tener un balance entre consumo y generación», detalló.
Sobre la situación de los sistemas en el occidente del país, que sufrieron dos desconexiones la víspera, mencionó que ocurrieron afectaciones por la debilidad del SEN, fuertes vientos y la falta de combustible.
Aseguró que la región ahora está en una fase de recuperación ligeramente diferente «porque contamos con Guiteras en línea, se levantaron las unidades de Energás» y otras a lo largo del país ya están en funcionamiento.
«Esperamos que en el día de hoy lleguemos a una fase superior a la que llegamos a tener ayer», auguró el ministro, al tiempo que reiteró que el país cuenta con el combustible necesario para mantener mejor el sistema.
De la O Levy subrayó que la situación técnica de las termoeléctricas y la generación distribuida sigue siendo tensa por los años de explotación y por no poder comprar piezas de repuesto. «Las unidades más jóvenes tienen más de 35 años de explotación», recalcó.
Durante su intervención también hizo referencia a numerosas muestras de apoyo y solidaridad que Cuba ha recibido de Colombia, México, Venezuela y Rusia, además de los ministerios homólogos y organismos internacionales.
El ministro comentó que, según pronósticos, se estima que de 24 a 48 horas todos los clientes de la nación caribeña puedan tener servicio eléctrico, sin contar las afectaciones que pueda ocasionar el huracán Óscar en el oriente del país.
Actualmente, en La Habana más de 216 mil clientes tienen servicio y el sistema eléctrico se encuentra interconectado desde el Mariel (Artemisa) hasta Holguín.
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