Mediante una declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores, las autoridades de Belmopán lamentaron que desde el pasado 18 de octubre la nación antillana enfrente apagones masivos a lo largo y ancho de su territorio.
Hizo referencia al impacto del bloqueo económico, financiero y comercial que Estados Unidos mantiene sobre Cuba, pues impide garantizar un suministro adecuado y estable de combustibles.
Igualmente, rechazó la inclusión del país insular en la lista de estados patrocinadores del terrorismo.
Desde el pasado día 18 Cuba entró en fase de contingencia por una desconexión total del Sistema Electroenergético Nacional (SEN) que obligó a mantener en operaciones solo las actividades de los sectores básicos.
La Habana, la capital, restauró en la tarde de este 21 de octubre el servicio energético en todo su territorio y el gobierno provincial mantiene las labores para arreglar pronto algunas averías que todavía persisten en la red de abastecimiento local.
Todavía varias provincias de Cuba siguen a oscuras, aunque el Occidente, Centro y Oriente de la nación cuentan con microsistemas para la generación del servicio y este lunes sincronizó al SEN la central termoeléctrica Antonio Guiteras, su mayor y más eficiente bloque unitario.
La falta de combustible debido a las presiones estadounidenses contra Cuba constituye la principal causa de afectación de electricidad en ese país, señaló este lunes el periódico Granma, al recordar que la escasez del carburante representa el principal problema obligado por el cerco económico, comercial y financiero impuesto por Washington.
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