En conferencia de prensa desde el Palacio Nacional de la Cultura (sede del Gobierno), el mandatario subrayó primero que días atrás, después de más de dos años preso, recuperó su libertad el periodista José Rubén Zamora.
“Ayer lo visité en su casa y tuvimos una extensa conversación sobre los desafíos que hoy tenemos, grandes en la profundización de la democracia, en la protección de la libertad de expresión, y en definitiva en la recuperación de las instituciones de justicia”, describió.
El jefe de Estado remarcó este punto por el compromiso que su administración tiene y del cual Zamora ha sido un ejemplo en la medida en que fue víctima de una persecución indebida y uso espurio de la prisión preventiva.
El pueblo de Guatemala está cansado de estas injusticias y es importante que el organismo judicial, particularmente bajo su nuevo liderazgo, responda a los cambios demandados, aseveró.
El político de 67 años mostró preocupación, especialmente por los antecedentes que expuso la familia del reconocido fundador de ElPeriódico sobre apremios ilegítimos y prácticas de tortura que sufrió.
Las graves violaciones a los derechos humanos son algo que nuestra sociedad no puede ni debe tolerar, señaló el exdiplomático y sociólogo de profesión.
Arévalo instó a que se investigue esta situación exhaustivamente tanto a nivel nacional como internacional.
Nunca más el uso inadecuado de nuestra justicia, la tortura y el terror contra los que piensan diferente, afirmó.
Nunca más un sistema oscuro persiguiendo el ejercicio de la prensa que debe ser siempre libre e incómoda con el poder cuando toque, enfatizó el presidente de Guatemala.
El Ministerio Público del Guatemala detuvo a mediados de agosto último a Ligia Hernández, entonces directora del Instituto de la Víctima, por el caso Corrupción Semilla, algo que analistas llamaron una maniobra completamente inventada.
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