“Zimbabwe es un país con bastantes recursos naturales, pero para su fomento necesita tener un comercio sin restricciones con otros países, pero a causa de las sanciones no tiene la capacidad para realizar el necesario intercambio comercial,” señaló en entrevista con Prensa Latina el embajador Machava.
Tampoco posee debido a esa misma causa –recalcó- la capacidad productiva para el desarrollo local, y esto también a su vez tiene un impacto negativo para Mozambique en particular.
Estos dos países de África Austral comparten una frontera de mil 231 kilómetros de largo que cubren tres provincias mozambicanas.
“La vida en las comunidades fronterizas entre ambos países antes de las sanciones transcurría normal, sana, tranquila, pero luego de las medidas punitivas injusta y arbitrarias se complicó la situación”, explicó el diplomático.
Se hizo más difícil poder intercambiar entre las poblaciones, fueron desapareciendo las transacciones mercantiles, financieras; quedó obstaculizado el fomento de la producción. “Entonces, tenemos un impacto negativo que no contribuye al desarrollo de ninguna de las dos naciones”, advirtió Machava.
Respecto a la decisión de la Comunidad de Desarrollo de África del Sur que integran 15 países de declarar el 25 de octubre como Día contra las Sanciones, el jefe de Misión opinó que fue un acuerdo estratégico para llamar la atención del mundo sobre los efectos negativos de esa política hostil que no solo aflige a un país, sino a todos de la región.
Ilustró que las penurias económicas de esa hostilidad ha provocado que tres millones de zimbabuenses hayan emigrado a países vecinos en busca de mejores condiciones de vida, y esta migración masiva genera problemas para las naciones receptores, y para las familias de esas personas que ven trunca la normalidad de sus vidas.
Refirió que Cuba, por igual, está sufriendo una política de criminal bloqueo por el gobierno de Estados Unidos desde hace más de 60 años, la cual provoca múltiples daños al pueblo de la isla y lo priva de poder desarrollarse con normalidad.
Machava calificó de excelentes las relaciones entre Mozambique y Cuba que describió como “países hermanos con nexos bilaterales históricos”
Añadió que su país tiene lazos de amistad, solidaridad y cooperación en varios dominios como educación, salud, ciencia, tecnología y cultura. Destacó que médicos cubanos brindan atención a los mozambicanos, “una obra de gran humanismo”, dijo.
El embajador afirmó que los dos gobiernos trabajan para dinamizar los vínculos y la cooperación a través de una comisión intergubernamental que ha trazado un plan de acción para darle seguimiento a los convenios establecidos.
Machava opinó que “necesitamos avanzar en otras áreas de cooperación. Por ejemplo, Cuba puede brindarnos asistencia para el mejoramiento del boxeo y otros deportes”, acotó.
Mozambique siempre estará al lado de Cuba –aseveró- en su lucha por la eliminación del bloqueo; hemos apoyado todas las resoluciones en la Asamblea General de la ONU contra esa política hostil e insensata “ y lo seguiremos haciendo”, concluyó el embajador.
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