A 18 meses de los comicios generales de abril de 2026, 47 por ciento de los encuestados por la empresa Ipsos respondieron que votarían en blanco, anularía el voto o no votarían por ninguno (30) o no dieron respuesta alguna (17).
El resto de los consultados expresaron su respaldo a la neoliberal Keiko Fujimori, con apenas 12 por ciento, seguida por el nacionalista radical Antauro Humala (8), el expresidente centrista Francisco Sagasti y el cómico de derecha extrema Carlos Álvarez (4 por ciento cada uno).
Ipsos ubica más abajo, con 4 puntos, al neoliberal Hernando de Soto y al derechista Rafael López, alcalde de Lima, y, con 2 puntos cada uno, a los progresistas Verónika Mendoza y Alfonso López, el neoliberal Rafael Belaúnde y el comentarista de televisión Phillip Butters.
Otros candidatos con porcentajes menores suman entre todos 11 por ciento, de acuerdo con el sondeo.
La dirigente neoliberal Fujimori declaró últimamente, en una entrevista con un periódico español, que está considerando la posibilidad de volver a postular, pese a que analistas de diversas tendencias cuestionan sus posibilidades de éxito.
Las dudas se deben a que la hija y heredera política del recientemente fallecido
exgobernante Alberto Fujimori, fracasó en cuatro intentos de ser elegida presidenta, los tres últimos en sendas segundas vueltas ante el nacionalista Ollanta Humala (2011), el neoliberal Pedro Pablo Kuczynski (2016) y el maestro rural Pedro Castillo (2021).
Tal rendimiento es que, con un toque de humor, más de un comentarista político ha señalado, con un toque de humor, que llegar a la segunda vuelta frente a Keiko Fujimori es la antesala de la Presidencia.
De otro lado, según la encuesta de Ipsos, el problema que más afecta a los encuestados y que, por tanto, será principal ingrediente de la campaña electoral, es el de la delincuencia (25 por ciento), evidentemente por el presente contexto de desborde criminal.
Detrás se ubican la corrupción (19), la pobreza (12), el desempleo (10), el abuso de las autoridades (7), el costo de vida (5) y la crisis política (4).
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