Según escribió en su red social X, el aumento del 26 al 46 por ciento de los ingresos corrientes de la nación que se trasladen debe ser gradual, lo cual debe supeditarse a una ley de competencias para los municipios, es decir, que se modifiquen las facultades actualmente desempeñadas por la nación para no aumentar el déficit fiscal.
También planteó que la fórmula de reparto adoptada en la regulación debe cerrar las brechas entre las regiones y por tanto debe privilegiar las regiones más excluidas para concretar la paz.
Por otra parte, pidió que el aumento de competencias en salud cubra todo el sistema de atención primaria para los municipios; que en la educación incluya la enseñanza de tres años de preescolar, y los dos años de educación superior gratuita en los colegios de media.
Por último, consideró que ante el incremento sustancial del poder del municipio que el acto legislativo produciría, se necesita una ciudadanía más unida y organizada que haga que el salto en la descentralización se convierta en un ejercicio de democracia local.
“El dinero no es para las mafias locales, es para las necesidades de la ciudadanía”, remarcó.
La reforma constitucional que busca establecer un nuevo régimen en el Sistema General de Participaciones en los departamentos, distritos y municipios, inició la discusión de su sexto debate en la plenaria del Senado hace una semana.
Según el senador Ariel Ávila, coordinador ponente del proyecto de Acto Legislativo, la iniciativa persigue el fortalecimiento de la autonomía territorial para la ejecución de recursos y proyectos, de manera directa, con el fin de disminuir la inequidad y favorecer el integral de las regiones de Colombia.
Actualmente, el Gobierno nacional transfiere a los entes territoriales un poco más del 20 por ciento de sus ingresos corrientes (ICN).
La reforma constitucional, que cursa su sexto debate de ocho pendientes en el Congreso, busca que en lo adelante los municipios reciban el 46,5 por ciento de los ICN para mejorar la prestación de los servicios básicos de educación, salud, agua para el consumo humano y saneamiento básico e infraestructura, entre otros.
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