Aquella renovación, muy polémica porque el equipo acababa de finalizar octavo en la Premier League, obedeció sobre todo a la euforia por haber ganado la FA Cup ante el vecino Manchester City.
Sin embargo, era solamente un canto de cisne, porque las cosas no iban nada bien, y se confirmó con el arranque de esta temporada, en la que los Diablos Rojos marchan en la posición 14, con nueve puntos en 11 partidos.
Un breve comunicado confirmó este lunes el esperado despido, pero como consecuencia de esa insólita firma en julio pasado ahora el plantel británico tendrá que pagarle 19 millones de euros al técnico por sacarlo del banquillo antes de tiempo.
Fueron en definitiva dos años y medio bastante convulsos, que se saldaron con dos títulos: una Copa de la Liga y la reciente FA Cup, pero ninguna evolución en el proyecto deportivo.
Económicamente, el United gastó unos 600 millones de euros en 21 jugadores desde que llegó Ten Hag, quien tampoco tuvo una relación buena con la prensa tras vetar a varios periodistas de acudir a sus ruedas de prensa.
De momento, el equipo estará bajo las riendas de su compatriota Ruud Van Nistelrooy, mientras consiguen a otro técnico, pero no se descarta que si se endereza el rumbo se mantenga al frente quien fue uno de sus jugadores más emblemáticos.
mem/lp
