El galardón está reservado para aquel jugador que mejor representa este deporte a través de su carácter extraordinario, participación comunitaria, filantropía y contribuciones positivas, tanto dentro como fuera del campo.
Pérez se convierte así en el segundo pelotero de su país en recibir tamaña distinción, después de la alcanzada por Carlos Carrasco en 2019.
Este premio fue instituido en 1973 en honor al jugador puertorriqueño miembro del Salón de la Fama y 15 veces integrante del Todos Estrellas, que murió en un accidente aéreo en 1972 mientras intentaba entregar suministros a las víctimas del terremoto en Nicaragua.
Según ha trascendido, Pérez junto a su familia distribuyen alimentos y medicamentos cada invierno a más de dos mil hogares en su natal Valencia y durante la última década su impacto se ha extendido a más de 10 mil familias necesitadas.
El también capitán de su equipo ha pagado decenas de cirugías para niños con labio leporino, dona anualmente más de mil juguetes a hospitales infantiles y apoya a los agentes de policía con reparaciones de automóviles, computadoras y renovaciones de oficinas.
Además, viaja regularmente a Colombia para asistir a la Fundación Carlos Fortuna, que ayuda a los padres y cuidadores de hombres jóvenes que se están preparando para convertirse en jugadores profesionales de béisbol en países de América Latina.
Otras de sus contribuciones es la asociación con organizaciones en Estados Unidos que luchan contra la esclerosis lateral amiotrófica, en particular Sarah’s Soldiers, recaudando dinero y concienciando para encontrar una cura. rgh/blc