La tragedia, considerada como la más grave de la historia reciente del país europeo, afectó sobre todo a Valencia, Málaga y Castilla La Mancha y fue provocada por una Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA).
Este fenómeno de la naturaleza, influenciado por el aumento de la temperatura en el Mediterráneo, nos recuerda la urgente necesidad de concertar acciones que permitan contrarrestar los efectos del cambio climático, señaló un comunicado publicado aquí en la página de la Cancillería.
El gobierno chileno envió sus condolencias a los familiares de las víctimas y a las comunidades afectadas.
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