Reunidos en Luanda analizaron la Propuesta de Concepto de Operaciones presentada por la facilitación angoleña y tras deliberaciones adoptaron por consenso el instrumento que permite operacionalizar el Plan Armonizado para la Neutralización de las FDLR y la Separación de Fuerzas/Levantamiento de las Medidas de Defensa de Ruanda.
De acuerdo con una nota de la Cancillería angoleña, ese documento será considerado durante la próxima sesión ministerial, que se celebrará el 16 de noviembre de 2024.
Los expertos igualmente aprobaron la composición (tripartita) del Mecanismo de Verificación Ad-hoc Reforzado (MVA-R), liderado por Angola e integrando por oficiales de enlace de la RDC y Ruanda.
Este mecanismo será lanzado oficialmente el 5 de noviembre de 2024, en Goma, RDC.
“El Gobierno de Angola, como facilitador del diálogo entre la RDC y Ruanda sobre la paz y la seguridad en la región oriental de la República Democrática del Congo, acoge con satisfacción las conclusiones de la Reunión de expertos de órganos de defensa y seguridad”, significó el comunicado de la Cancillería.
El pasado 12 de octubre, en Luanda, los cancilleres de Ruanda y la RDC llegaron a un acuerdo sobre las actividades y responsabilidades respectivas en el Plan Armonizado para la Neutralización de las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR) y la Separación de Fuerzas/Levantamiento de las Medidas de Defensa de Ruanda.
La ministra de Relaciones Exteriores congoleña, Thérèse Kayikwamba Wagner, y su homólogo ruandés, Olivier J.P. Nduhungirehe, encomendaron a los expertos la elaboración de un programa detallado para la implementación del Plan.
Ambos países están en medio de un conflicto, pues Kinshasa acusa a Kigali de brindar apoyo a los rebeldes del Movimiento 23 de Marzo (M23), que mantiene ocupadas varias ciudades y comunas en el este de la RDC, así como de implicarse directamente y robar recursos minerales.
En tanto Ruanda sostiene que el Ejecutivo congoleño da respaldo a las FDLR, hostiles a su gobierno.
Ambas partes tienen desde el 30 de julio un acuerdo de alto al fuego, mientras que en agosto Angola formuló una propuesta de paz definitiva, actualmente en análisis.
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