Por Fausto Triana
En todo caso, se trata de uno de los mayores desafíos del mundo, de carácter ineludible e insoslayable. Conclusiones a priori surgidas durante un debate en la presentación en España del Anuario de la Comunicación 2024.
Sobre las perspectivas de la IA, el especialista estadounidense y profesor de la Universidad de Stanford, Jerry Kaplan, pionero de esta tecnología, las resumió en dos palabras: brillantes o peligrosas.
“Imaginemos en 50 años que vamos a pintar nuestra casa. Necesitaremos de una sola persona que irá con una máquina capaz de hacerlo en una hora. El valor de nuestro tiempo se aprecia y las facilidades para adelantar nuestras vidas permiten aprovechar y disfrutar todo mucho mejor”, reflexionó.
Sin embargo, los mecanismos de regulación de la IA serán fundamentales en el uso correcto y para los buenos fines que hagamos de la tecnología. Europa puede marcar un modelo en este sentido y esperemos que las elecciones de Estados Unidos no nos hagan retroceder, completó Kaplan.
La Asociación de Directivos de Comunicación (Dircom) de España, puso en el ciberespacio la nueva publicación de referencia, que profundiza en el papel de la IA en este dominio, analizando, desde perspectivas muy distintas, cómo esta tecnología está transformando el sector.
En el interesante intercambio entre el también filósofo norteamericano y Asunción Gómez Pérez, vicerrectora de la Universidad Politécnica de Madrid y especialista en el procesamiento del lenguaje, se profundizó en cómo la IA está impactando en la comunicación y en la sociedad en general.
“La tecnología está bajo riesgo, porque en el fondo no es el problema, sino el control, las regulaciones, esenciales para su utilidad y empleo en el caso de la IA. La IA trata el ADN humano como si fuera un lenguaje, aprendiendo sus reglas y relaciones para deducir información funcional”, opinó la académica Gómez Pérez.
Al profundizar en el tema, mencionó las dificultades de determinar el lenguaje de las IA a partir de que se define desde ocho billones de parámetros con modelos matemáticos.
Entre los riesgos más comunes, existe preocupación en la actualidad por los bulos o fake news, que crean desinformación.
Gómez Pérez puso como ejemplo la posibilidad de crear un influencer virtual de la IA, generador de bulos y el reto que supone neutralizarlo, de ahí la importancia de la formación educacional de los jóvenes y de facilitar el acceso al conocimiento a personas de mayor edad que son parte del mercado.
Al introducir el debate, Miguel López Quesada, presidente de Dircom, detalló que el Anuario de la Comunicación 2024 abarca cinco capítulos, Estado actual de la IA; Usos y aplicaciones; Etica y regulación; Casos de éxitos; y Futuro de la IA.
El texto cuenta entre otros con aportes de Éric Sadin, escritor y filósofo tecnocrítico; Luciano Floridi, filósofo y director del Digital Ethics Center de la Universidad de Yale; Nuria Oliver, científica experta en IA; y Nuria Ávalos, directora general de IndesIA.
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