El titular de la cartera, Goran Vesic, detalló que la pesquisa abierta por los fiscales en Novi Sad incluirá al Instituto de Tráfico y la compañía ferroviaria, ambas estatales, y el consorcio chino que llevó a cabo las obras de renovación.
Al menos dos niños murieron en la catástrofe, que se produjo este viernes al derrumbarse un tramo del tejado de la entrada de la estación; los equipos de rescate trabajaron hasta altas horas de la noche con maquinaria pesada para sacar a los muertos y heridos de entre los escombros.
La investigación determinará quién tomaba las decisiones y ponía los sellos y las firmas, quién se encargaba de controlar la calidad de las obras, declaró Vesic a los medios.
Por su parte, el ministro serbio del Interior, Ivica Dacic, dijo que las autoridades tienen previsto interrogar este sábado a 20 personas en relación con la catástrofe, incluidos responsables del ministerio y del operador estatal de ferrocarriles.
La compañía estatal de Ferrocarriles Serbios, el Instituto Estatal de Tráfico y el consorcio chino -China Railway International Co. Ltd y China Communications Construction Company-, que renovó el edificio, afirmaron la víspera que la parte del inmueble que se derrumbó no formaba parte de las obras.
La estación de la ciudad de Novi Sad, situada a unos 70 kilómetros al noroeste de Belgrado, se renovó en 2021 y 2022.
Otras obras menores continuaron hasta julio pasado, cuando el Ministerio de Transporte dijo que se había invertido un total de 16 millones de euros en la renovación.
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