De acuerdo con fuentes citadas por el diario Al-Watan, Berger, que anteriormente sirvió como embajador del bloque europeo en Turkiye y luego en Egipto, tiene una larga experiencia en asuntos sirios.
Las fuentes consideraron que la decisión de nombrar un enviado especial para Siria se debe al trabajo diplomático italiano en Bruselas, basado en el hecho de que Roma es el centro de los gestos para normalizar las relaciones con este país.
Agregaron que Italia espera persuadir a los alemanes de ponerse a su lado para formar una fuerza mayor contra los franceses, quienes en cambio lideran el grupo de quienes se niegan a sentarse en la misma mesa con los sirios.
El enfoque italiano se basa en el apoyo a la provisión de oportunidades laborales y asistencia a los refugiados que decidan regresar a Siria. Christian Berger comenzó a trabajar en instituciones europeas en 1997, primero como responsable de las relaciones con Siria y luego como asesor político para cuestiones de Oriente Medio. Anteriormente trabajó en la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa en Viena y en las fuerzas de Naciones Unidas en Siria y Líbano.
De acuerdo con medios de prensa italianos, Roma designó un embajador en Siria después de 13 años del cierre de su sede diplomática en esta capital con el inicio de la guerra impuesta a esta nación levantina.
Las fuentes indicaron que Stefano Ravagnan, actualmente enviado especial del Ministerio de Asuntos Exteriores para Siria, fue nombrado embajador y asumirá su nuevo cargo en breve. En julio pasaado, ocho países de la Unión Europea (UE), incluida Italia, le escribieron una misiva al jefe de Política Exterior de dicha entidad, Josep Borrell, en la que solicitaron una reconsideración de sus relaciones con Siria.
Nuestro objetivo es una política en Siria más activa, orientada a los resultados. Esto nos permitiría aumentar nuestra influencia política y la eficacia de la ayuda humanitaria, dijeron los cancilleres de Austria, Croacia, Chipre, Grecia, República Checa, Eslovaquia, Eslovenia e Italia en su carta a Borrell.
Propusieran una mayor comunicación con el presidente Bashar Al-Assad con el fin de incrementar su influencia política e hicieron un llamado al bloque para revisar y evaluar sus posiciones hacia la nación árabe.
En la actualidad, funcionan parcialmente seis embajadas de la Unión Europea en Damasco: Rumania, Bulgaria, Grecia, Chipre, República Checa y Hungría.
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