Si bien los cortes bajaron de 14 horas a seis, existe la posibilidad de que regresen las suspensiones del servicio eléctrico más prolongadas, advierten analistas.
El feriado de cinco días, desde el jueves 31 de octubre hasta el 4 de noviembre, así como el aumento de la producción de Coca Codo Sinclair, la mayor hidroeléctrica del país, debido a las lluvias en la zona amazónica, permitieron recuperar el nivel del embalse de Mazar.
Esa represa, ubicada en el sur del país, abastece de agua al Complejo Hidroeléctrico Integral Paute, compuesto por las centrales Mazar, Paute y Sopladora, y que cubre el 38 por ciento de la demanda nacional.
No obstante, tras el feriado los ecuatorianos volvieron a sus actividades cotidianas y la cantidad de agua almacenada en Mazar ya se redujo este mismo martes, según reportes de medios locales.
El consultor eléctrico Ricardo Buitrón comentó al portal digital Primicias que el embalse continuará su caída estos días y volvería a tocar niveles mínimos entre el jueves o viernes de esta semana, con lo cual podrían volver los cortes de luz prolongados.
El presidente del Colegio de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos de Azuay, Diego Morales, afirmó al canal Teleamazonas que hay tres factores que deberían cumplirse para la reducción de horas de apagones.
Según comentó, el primer elemento es que debe llover intensamente, de cinco a seis horas diarias durante dos semanas.
Este martes, cayeron fuertes precipitaciones en la ciudad sureña de Cuenca que ayudan a mejorar los caudales de ríos que alimentan a Mazar.
El segundo factor del que habló Morales es un aumento de la generación de energía térmica y el tercero que llegue electricidad desde Colombia, pero ninguno de esos escenarios se ha presentado.
“Desde nuestro análisis, netamente técnico, consideramos que esta reducción tan grande es riesgosa”, apuntó Morales y opinó que programar apagones de 10 horas habría sido técnicamente más adecuado.
Tampoco se concreta la compra de electricidad a empresas privadas colombianas, como anunció la semana pasada la ministra encargada de la cartera de Energía y Minas, Inés Manzano.
Alejandro Castañeda, presidente de la Asociación Nacional de Empresas Generadoras de Colombia, aclaró que el vecino país no puede vender porque la situación climática es compleja y existe un riesgo de apagón para febrero de 2025.
En declaraciones a la emisora Radio Pichincha afirmó que apenas las lluvias regresen y se puedan recuperar los embalses de las hidroeléctricas, el vecino país podría vender a Ecuador energía.
En ese panorama, Ecuador sufre la sexta semana consecutiva de apagones, una crisis que el Ejecutivo atribuye a la peor sequía en los últimos 60 años.
Expertos y ciudadanos aseguran que el origen de la emergencia energética está en la falta de inversión y previsión de las autoridades, que no adoptaron medidas ante los reportes que preveían la sequía.
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