Sin esperar la proclamación oficial de la elección de Trump, Boluarte agregó que “Estamos seguros que durante su mandato se continuará profundizando y ampliando la fuerte relación estratégica que mantienen nuestros países en materia de inversiones, comercio y otras importantes áreas”.
El analista internacional Farid Kahhat, por su parte, advirtió que el virtual presidente electo de Estados Unidos prometió en su campaña aplicar aranceles de 10 a 20 por ciento, lo cual afectaría el tratado de libre comercio (TLC) que ese país mantiene con Perú.
“¿Realmente los empresarios peruanos prefieren un candidato que va a violar los términos del TLC e imponer un arancel que actualmente no pagan los productos peruanos?”, preguntó Kahhat.
Por su parte, el portal periodístico de Internet La Mula apuntó que Trump planteó además la deportación masiva de inmigrantes indocumentados, entre los cuales se estima que hay 600 mil peruanos que remesan dinero a sus familias en Perú.
Agregó que “las políticas de mano dura y nacionalismo económico que caracterizan a Trump podrían desencadenar cambios en la política exterior de Estados Unidos hacia América Latina”, agregó.
“La postura del nuevo presidente norteamericano probablemente no sea favorable para la región”, advirtió y señaló que el gobierno peruano debería evaluar medidas para mitigar el impacto de las políticas de Trump en matera de comercio y migración.
“Con el retorno de Trump a la Casa Blanca, Perú y otros países latinoamericanos podrían enfrentarse a mayores restricciones comerciales y a la presión de adoptar políticas alineadas con la postura migratoria estadounidense”, aseveró La Mula.
En redes de Internet, elementos de derecha extrema de Perú celebran la elección, lo que hicieron anticipadamente congresistas de similar posición como Patricia Chirinos y Alejandro Muñante y la primera hasta difundió un video de apoyo a la candidatura de Trump.
El economista Eduardo Recoba señaló que Trump es “una mala idea para Latinoamérica y Perú”, porque nunca tuvo un plan de gobierno y en su campaña solo se dedicó a atacar los derechos y a la democracia y no tiene políticas en las áreas de economía, vivienda y salud.
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