El grupo, que reúne a las 19 economías más grandes del mundo y las uniones Europea y Africana, es liderado por Brasil este año.
La Casa Blanca confirmó la presencia de Biden en la cumbre del G20 en Río de Janeiro, programada para el 18 y 19 de noviembre.
El mandatario anfitrión y el demócrata deben reunirse en agenda bilateral en la capital de Río.
La expectativa es que Lula vaya a Río el 16 de noviembre, para la clausura del G20 Social. Antes de la salida hacia el foro del grupo, Biden debe ir a Manaos, capital del norteño estado de Amazonas.
Según el Palacio del Planalto, sede del Poder Ejecutivo, la llamada hecha por iniciativa de Biden duró aproximadamente media hora.
El norteamericano confirmó la adhesión de Estados Unidos a la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, propuesta por Brasil y aprobada por los demás miembros del G20.
«Lula reiteró su amistad y admiración por el presidente Biden y observó el excelente momento de las relaciones entre Brasil y Estados Unidos en los últimos años», informó el Planalto.
De acuerdo con la Casa Blanca, el político demócrata deseó la recuperación total del líder progresista brasileño de la caída en el baño (19 de octubre), cuando se cortó la nuca y tuvo que llevar puntos.
El accidente ocurrió en el Palacio de la Alvorada, residencia oficial de la presidencia en Brasilia.
Biden y Lula también hablaron sobre la iniciativa conjunta en defensa de los derechos de los trabajadores, firmada por los presidentes en septiembre del año pasado en Nueva York, Estados Unidos.
Finalmente, el gobernante norteamericano destacó la importancia de Brasil para la preservación de las selvas tropicales y la lucha contra el cambio climático.
Ambos están de acuerdo en mantener un contacto cercano sobre el escenario regional y mundial.
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