El documento fue dado a conocer durante la inauguración de la Novena Conferencia Ministerial sobre la Sociedad de la Información, que reúne aquí a representantes de Gobiernos, académicos, miembros de la sociedad civil y organismos internacionales.
En una región con casi 670 millones de personas, el 10 por ciento de la población controla cerca del 55 por ciento de la riqueza total, mientras el 40 más pobre sólo accede a 10 puntos porcentuales, dijo Javier Medina, director ejecutivo adjunto de la Cepal.
El organismo de Naciones Unidas considera que la transformación digital y el uso de las tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial (IA), pueden ser parte de la solución.
Tal es la propuesta contenida en el documento “Superar las trampas del desarrollo en la era digital”, que fue presentado en la apertura de la Conferencia.
El texto analiza cómo aprovechar estas tecnologías para resolver el problema de la baja productividad agudizada durante la última década, cerrar las brechas sociales, disminuir las desigualdades y mejorar el funcionamiento de las instituciones.
La IA puede mejorar la capacidad de gobernanza, con el aumento de la eficiencia de los procesos gubernamentales y la oferta de servicios, lo cual es fundamental si consideramos que el 70 por ciento de la población desconfía de sus instituciones.
Medina señaló la importancia de la cooperación regional ante desafíos compartidos, como la ciberseguridad, la protección de datos y la regulación de la IA que demandan, añadió, enfoques concertados y coordinados.
En la jornada de este jueves también participó el Ministro chileno de Relaciones Exteriores, Alberto van Klaveren, quien mencionó que la agenda digital de la región, conocida como eLAC, enfrenta una revolución sin precedentes.
La tecnología puede responder a demandas ciudadanas y facilitar el acceso a servicios esenciales como educación y salud, sin embargo también existen riesgos como la pérdida de empleos, la amenaza a la privacidad, la transparencia y seguridad de los datos, señaló.
Destacó que los avances recientes intensificaron la competencia geopolítica y la carrera por el dominio de patentes y regulaciones, con retos adicionales a nuestra región, cuya dependencia de tecnología es grande.
Expresó van Klaveren su convicción de que la innovación digital debe poner a los derechos humanos en el centro, orientando su desarrollo hacia sociedades más justas, inclusivas y sostenibles.
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