De acuerdo con el estudio, al desglosar lo acumulado hasta el noveno mes del año, se observa que de los cuatro mil 917,4 millones recaudados, tres mil 939,6 millones corresponden a ingresos tributarios; 956 millones a no tributarios (-26,1 por ciento); y 21,8 millones a otros (-80,7 por ciento).
Sólo en septiembre, los ingresos corrientes ascendieron a 608 millones de dólares, de los cuales 524,8 millones pertenecen a la recaudación tributaria.
El déficit se situó en 369,2 millones de dólares, comparado con el presupuesto Ley para septiembre de 2024. La cifra versus el año anterior presenta una disminución de 94,6 millones de dólares.
Mientras que los ingresos tributarios reflejaron un déficit de 251,6 millones con respecto a la meta presupuestada, es decir 60,1 millones menos frente al año anterior.
Las cifras preliminares de la DGI se dan en un contexto en el que el ministro de Economía y Finanzas, Felipe Chapman, ya ha confirmado que en “Panamá existe un alto nivel de evasión fiscal”.
Según las estimaciones de Chapman, lo eludido por este concepto asciende a los mil millones y expone la necesidad de reforzar la DGI.
En un reciente conversatorio con la prensa, el funcionario señaló que se debe tener una DGI mucho más eficaz porque hay demasiado incumplimiento en la tributación.
“Estamos seguros de que los ciudadanos van a contribuir para pedir su factura fiscal porque de allí salen los recursos para el agua, salud, escuelas, centros médicos, carreteras, por mencionar algunos. En eso vamos a trabajar con un gran compromiso”, remarcó en alusión a los debates sobre un poryecto de ley sobre el seguro social.
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