Miura mantiene la intención de desempeñarse en su temporada número 40 en el fútbol profesional, en el referido equipo de la cuarta división japonesa, pese a celebrar su 58 cumpleaños en febrero venidero, según reporte de la agencia de noticias Kyodo.
Reconocido como el futbolista profesional en activo más longevo, Miura aun disfruta sobre la grama cuando todos los jugadores con los cuales rivalizó al debutar al máximo nivel —contaba con 19 años— ya se retiraron desde hace décadas, incluso muy pocos futbolistas con 40 o más años de edad se desempeñan en equipos profesionales.
El peruano Paolo Guerrero (cumplirá 41 en enero), el paraguayo Roque Santa Cruz (43) y el brasileño Felipe Melo (41) son algunos de los pocos que juegan aun tras sobrepasar las cuatro décadas, cifra a la que se acercan, entre otros, los ganadores de Balón de Oro, el astro portugués Cristiano Ronaldo (llegará a 40 en febrero) y el croata Luka Modric.
Miura ha insistido en varias oportunidades que su intención es jugar hasta los 60 años y que se prepara con severa disciplina para lograrlo.
King Kazu, como es conocido en Japón, debutó como profesional con en 1986 en el club Santos de la liga brasileña —el mismo del cual surgió el legendario Pelé—, allí jugó cuatro temporadas y luego regresó a su país, donde obtuvo el premio MVP en 1993 jugando con el Verdy Kawasaki, durante la temporada inaugural de la J-League, máxima división japonesa.
En la campaña 1993-1994 se convirtió en el primer futbolista asiático en jugar en la Serie A italiana (contratado por el Genoa CFC), una temporada en la cual jugó 21 partidos, marcó un gol a la Sampdoria y vivió momentos difíciles con desavenencias con el entrenador que lo colocaba como interior, siendo Miura un habitual delantero.
El atacante nipón jamás olvidó que en su debut ante el AC Milan, al disputar un balón con el defensor Franco Baresi, sufrió una conmoción cerebral y rotura en el tabique nasal, que le dejó fuera de juego por varias jornadas.
Posteriormente pasó por el Dinamo Zagreb (Croacia), el Sydney FC de la A-League australiana, y Kyoto Sanga FC, Vissel Kobe y Yokohama FC en la máxima división japonesa.
El oriundo de la Prefectura de Shizuoka —nació el 26 de febrero de 1967— integró la selección nacional de Japón durante varios años, portando el dorsal 11, con la cual ganó la Copa Dinastía y la Copa Asiática en 1992, ocasión en que además resultó el jugador más valioso.
En 1998 resultó figura clave en la clasificación de Japón por primera vez para una Copa del Mundo, pero finalmente el seleccionador nacional Takeshi Okada no le convocó para la fase final en Francia debido a desencuentros personales.
Con los Samuráis Azules marcó 55 goles —solo superado por Kunishige Kamamoto— en 89 partidos, el último de los cuales fue un amistoso contra Jamaica en la ciudad marroquí de Casablanca, efectuado el 6 de junio del 2000.
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