De igual manera, manifestó la esperanza sobre un cambio durante su mandato tras la juramentación del cargo el venidero 20 de enero.
A su juicio, las conversaciones con Trump acontecían más a menudo que con Joe Biden y consideró que aún es muy pronto para analizar cómo incidirá su regreso a la Casa Blanca en la ofensiva israelí contra la Franja de Gaza.
En declaraciones a la prensa durante el viaje de regreso a su país luego de la visita a Arabia Saudí y Azerbaiyán, refirió que resta por ver las medidas previstas por el recién electo presidente luego de la transición.
Respecto a la postura de Washington ante países como China y Rusia indicó que «Occidente, con Estados Unidos a la cabeza, los ve como una amenaza establecida tras la Segunda Guerra Mundial» y, por tanto, «el tiempo nos dirá cuál actitud desarrollan el presidente Xi Jinping y Vladimir Putin (…) son naciones con una posición importante en el mundo».
Recordó, asimismo, que Beijing y Moscú consideran los ataques de Israel como injustos e ilegales y demandaron el fin de las agresiones y la resolución del conflicto mediante la diplomacia.
Además, esos dos países forman parte de una iniciativa conjunta que solicita medidas para detener el envío de armas y munición a Tel Aviv, lo cual es «un paso importante dado que si el envío de armas continúa, Israel se volverá cada vez más agresivo».
En consideración del presidente turco «cada día que Israel no es detenido, la situación humanitaria en Líbano y Palestina empeora».
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