Desde el 17 de septiembre, el movimiento político y militar libanés precisó los golpes contra asentamientos (456), puntos militares (361), bases (164) y sitios fronterizos (127) pertenecientes al ejército enemigo.
Al compartir un resumen de las acciones durante dos meses de respuesta, Hizbulah indicó que el número acumulado de pérdidas sufridas por Israel ascendió a más de 100 muertos y de mil heridos, mientras el promedio por día fue de 22 operaciones.
Los datos detallaron el ataque a 61 vehículos militares, 53 centros de mando, 30 campos de artillería, 17 fábricas y compañías militares y 11 instalaciones de entrenamiento.
En esta etapa, la Resistencia dirigió el fuego contra 10 aeropuertos y siete drones, además de cuatro almacenes militares, cuatro fortificaciones, dos unidades de asentamiento, dos equipos técnicos, un taller militar y un puesto de control.
De acuerdo con lo divulgado, los combatientes de Hizbulah bombardearon 101 cuarteles militares, 58 ciudades, enfrentaron 29 drones y aviones, e hicieron frente a 28 infiltraciones terrestres en el sur de la nación.
Respecto al armamento, la Resistencia anunció la utilización de mil 47 misiles, 84 piezas de artillería y 124 armas aéreas, además de emplear 65 cohetes guiados, 29 de defensa aérea, 12 armas de francotirador y ametralladoras, y 10 de ingeniería.
Según la información, el movimiento atacó más de 100 asentamientos, a 30 kilómetros del radio de la zona evacuada y a 150 kilómetros de profundidad de la frontera sur, que obligó al desplazamiento de más de 300 mil colonos.
En este contexto, el canal 12 israelí entrevistó al mayor general de reserva Eitan Dangote, quien calificó de muy difíciles los combates en Líbano.
A criterio del oficial, Israel debe llegar a un arreglo con Líbano y a un alto al fuego.
Para el analista militar del canal i24NEWS, Yossi Yehoshua, Israel no puede subyugar a Hizbulah y no logró devolver a los colonos al norte.
A propósito, el mayor general de reserva del ejército, Israel Ziv, apuntó que Israel no debería insistir en nada que perjudique la soberanía de Líbano.
En este punto, aconsejó a las autoridades de Tel Aviv buscar un acuerdo con Líbano debido al estado de reserva, el agotamiento y la situación del Estado.
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