En sus mensajes, el Ministerio de Asuntos Exteriores enfatizó el compromiso de Iraq con los principios de la Carta de las Naciones Unidas y la estabilidad en su entorno regional e internacional.
De acuerdo con lo divulgado por la Agencia de Noticias Iraquí, Bagdad reiteró que la denuncia de la entidad sionista al Consejo de Seguridad forma parte de una política sistemática para crear acusaciones y pretextos con el objetivo de ampliar el alcance del conflicto en la región.
La cancillería destacó que el recurso de Iraq al Consejo de Seguridad responde a su interés en que tal institución desempeñe su papel en el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales.
Al mismo tiempo, insistió en la necesidad de adoptar las medidas necesarias para detener la agresión israelí en la Franja de Gaza y Líbano, y obligar al gobierno de Tel Aviv a detener la violencia en curso en la región y dejar de emitir amenazas.
El Ministerio explicó que Iraq desea ejercer autocontrol en cuanto al uso de su espacio aéreo para atacar a un país vecino.
Subrayó la importancia de la intervención de la ONU para poner fin a estos comportamientos agresivos, que constituyen una flagrante violación de los principios del derecho internacional.
En sus misivas, Iraq pidió esfuerzos concertados para detener la escalada israelí en Medio Oriente y garantizar el respeto de las leyes y cartas internacionales, lo que contribuye a mejorar la seguridad y la estabilidad en la región.
Con anterioridad, el primer ministro Mohammed Shia al-Sudani rechazó la denuncia presentada por Israel al Consejo de Seguridad y consideró que tal acción representa un pretexto y una excusa para atacar a Iraq, y expandir la guerra en la región.
Durante una reunión de emergencia del Consejo Ministerial para la Seguridad Nacional, Al-Sudani renovó la negativa de Iraq a entrar en la guerra, sin dejar de ser coherente en su posición de principios de ponerle fin y buscar alivio para los pueblos palestino y libanés.
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