El Centro de Operaciones de Emergencia comunicó 15 civiles fallecidos y 63 lesionados como consecuencia del bombardeo israelí en la madrugada contra un edificio residencial en Basta, en Beirut, mientras continúan los esfuerzos para retirar los escombros.
Desde la zona atacada, el diputado Amin Sherri desmintió las alegaciones israelíes de la presencia en el inmueble de alguna figura de la Resistencia de Líbano (Hizbulah).
En declaraciones a la prensa, el parlamentario aseguró que el bombardeo en Basta fue la octava agresión contra Beirut, y ningún lugar representa un objetivo militar alguno.
De acuerdo con reportes locales, las incursiones israelíes apuntaron en la jornada a los barrios de Al-Ruweis y Hadath, en el suburbio sur de Beirut.
Las autoridades sanitarias indicaron que siete personas perdieron la vida y 26 sufrieron lesiones debido a las agreisones en la ciudad de Tiro y su distrito, en el sur del país.
Israel lanzó municiones de fósforo blanco, prohibido internacionalmente, sobre las áreas de Khiam y Rashaya Al-Fakhar, además de atacar con artillería las colinas de Kfar Shouba.
En el este de la nación, 24 ciudadanos murieron y 45 resultaron heridos tras el bombardeo israelí en ciudades del distrito de Baalbek-Hermel. Fuentes médicas lamentaron el deceso de dos personas y otros 13 lesionados debido a la hostilidad enemiga en las aldeas de Flawi, Brital, Ras al-Ain y Hortaala, pertenecientes a Baalbek.
En la región de la Bekaa occidental, dos personas recibieron el impacto de un ataque israelí en Sohmar y aviones de combate apuntaron al cruce fronterizo de Jusiyah al-Qaa con Siria.
A la luz del bombardeo y el sobrevuelo constante de aviones de reconocimiento, los combatientes de Hizbulah frenan en el terreno los intentos israelíes de avanzar por las aldeas de Khiam, Deir Mimas, Kafr Kila y Chama, y en paralelo lanzan misiles contra posiciones de retaguardia, asentamientos y bases militares a la largo de la frontera.
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