Tras la entrada en vigor, los residentes del sur del país, los suburbios de Beirut y el valle de Bekaa comenzaron su regreso después de meses de desplazamiento forzado, dijo la organización en una actualización.
La Acnur confirmó un tráfico pesado en la carretera de la capital hacia la porción sur desde las primeras horas de esta mañana.
Más de una decena de camiones del organismo entregaron suministros de emergencia a tres mil 100 personas en la ciudad oriental de Baalbek, incluido mantas, colchones, chaquetas de invierno, láminas de plástico, lámparas solares y colchonetas para dormir.
«Continuaremos trabajando en estrecha colaboración con las autoridades locales y los socios para brindar la asistencia que tanto necesitan las personas afectadas para ayudarlas a mantenerse calientes y seguras este invierno», agregó la Agencia.
Asimismo, anunció que mantendrá la asistencia esencial a medida que las personas desplazadas reconstruyan sus vidas después de sufrir muchas pérdidas y destrucción.
Por su parte, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia saludó el anuncio de alto al fuego aunque lamentó las pérdidas sufridas por innumerables civiles en todo el Líbano.
«Ahora debe comenzarse a trabajar con urgencia para garantizar que esta paz se mantenga», dijo en un comunicado su directora ejecutiva, Catherine Russell.
Los niños y las familias deben poder regresar a sus comunidades en condiciones de seguridad, especialmente los desplazados en refugios y comunidades de acogida. La protección de los niños y sus familias debe seguir siendo el centro de todos los esfuerzos para estabilizar la situación y apoyar la recuperación, pidió la funcionaria.
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