La orden presidencial establece el seguimiento a la implementación del Plan de Turismo para el Pueblo Garífuna y Afrodescendientes, así como la implementación de ciencia y tecnología para actividades productivas y la instalación de capacidades tecnológicas para las juventudes nativas.
También propone la creación de programas de educación bilingüe e intercultural en favor de la comunidad indigena, la gestión y salvaguardia de sus tradiciones y lugares sagrados, de igual manera que insta a la búsqueda de mecanismos para la participación de representantes de los garífunas en espacios internacionales.
Destaca además la implementación de un programa de salud con pertinencia cultural y, en cuanto a la temática medioambiental, contempla el acceso a proyectos de agricultura familiar y desarrollo rural territorial.
Durante la firma de la agenda, el mandatario guatemalteco se comprometió a mantener el diálogo respetuoso y de buena voluntad durante el proceso de construcción democrática y a continuar generando propuestas para la correcta inversión pública, la rendición de cuentas y la participación ciudadana.
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