De acuerdo con fuentes militares, los soldados de la 25 División de Tropas Especiales frenaron el avance de los radicales tras violentos choques en las proximidades de la ciudad de Saraqueb, ubicada en la carretera estratégica entre Alepo y Damasco.
Durante los enfrentamientos, decenas de terroristas fueron eliminados y varios de sus vehículos y blindados quedaron destruidos, mientras cuatro militares, entre ellos un oficial, fallecieron en los combates.
Asimismo, seis aviones de combate sirios y rusos, y varios helicópteros bombardean los movimientos de los radicales para debilitarlos y golpear sus rutas de suministros.
Grandes refuerzos militares del ejército sirio y de formaciones aliadas de Rusia, Irán y el Movimiento de Resistencia Libanés (Hizbullah) llegaron a los frentes de combate, en medio de informaciones sobre la llegada también del teniente general Suheil Al-Hassan, comandante de las tropas especiales a la zona.
Anteriormente, medios de prensa informaron que la carretera que comunica la ciudad norteña de Alepo con Damasco, la capital siria, fue cortada, en medio de una gran ofensiva de grupos radicales, en provincias de Alepo y Idlib, en el noroeste de la esta nación árabe.
Para preservar la seguridad de los ciudadanos que usan la vía M-5 que comunica Alepo con Damasco y otras tres provincias sirias, los uniformados la cortaron temporalmente, afirmaron oficiales citados por los medios de prensa locales.
Según las fuentes, al menos 200 radicales fueron eliminados, y decenas resultaron heridos, muchos son de nacionalidades extranjeras, desde el inicio de la ofensiva radicales en horas de la madrugada de este miércoles.
Asimismo, al menos 35 regulares sirios y un asesor iraní perdieron la vida, además, y la mayoría de las bajas del ejército sirio fueron en el oeste de Alepo.
La víspera, grupos terroristas lanzaron un ataque repentino contra el ejército sirio en el oeste de Alepo, y lograron tomar el control del regimiento 46 y otros puntos militares, además de cuatro localidades.
Las Fuerzas Armadas Sirias, con el apoyo de sus aliados de Rusia e Irán, liberaron más del 80 por ciento del territorio nacional de los terroristas, mientras quedan algunos reductos en la vasta región desértica de Al-Badieh y en la provincia septentrional de Idlib.
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