En una convocatoria divulgada por la Confederación General Italiana del Trabajo (CGIL), se señala que esta protesta iniciada esta mañana y que se extenderá durante ocho horas, se realiza para exigir cambios en la ley de presupuesto, así como aumentos en salarios y pensiones.
En este paro, al que se suman los afiliados a la Unión Italiana del Trabajo (UIL), también se exige un mayor financiamiento para la asistencia sanitaria, la protección y seguridad, así como para el sector de la educación y los servicios públicos, además de un incremento en las inversiones destinadas a las políticas industriales.
La movilización se desarrollará principalmente en 43 urbes del país, con marchas en Bolonia, Pordenone, Treviso, Fabriano, Terni, Pescara, Bari, Campobasso, Turín, Palermo, Florencia, Nápoles y Roma, donde los trabajadores se desplazarán desde la Plaza del Esquilino hasta la Vía de los Foros Imperiales.
También se desarrollarán actos en las ciudades de L’Aquila, Chieti, Teramo, Potenza, Cosenza, Génova, Milán, Bérgamo, Brescia, Cremona, Como, Lecco, Mantua, Pavía, Sondrio, Varese, Brindisi, Foggia, Lecce, Taranto, Cagliari, Trento, Bolzano, Aosta, Venecia, Padua, Rovigo, Belluno, Verona y Vicenza.
Los gremios italianos que llamaron a esta huelga exigen cambios en el proyecto de Ley de Presupuesto, pues consideran que lo previsto implica mantener la pérdida de poder adquisitivo de trabajadores y pensionados causada por la inflación, así como el crecimiento de los trabajos precarios e ilegales.
Critican la inclusión en esa norma jurídica de recortes en los servicios públicos, empezando por la sanidad, la educación, el transporte y las autoridades locales, mientras las renovaciones de contratos para el sector público solo cubren un tercio de la inflación y la política tributaria favorece a los evasores de impuestos.
La CGIL y la UIL consideran insuficiente la revalorización de las pensiones, lamentan la ausencia de una adecuada política industrial, con recortes en las inversiones y retrasos en la implementación del Programa Nacional de Recuperación y Resiliencia (PNRR) y valoran como incorrecta la estrategia para desarrollar el sur del país.
El secretario general de la CGIL, Maurizio Landini, encabezará una manifestación desde Porta Lame hasta la Plaza Mayor, en la norteña ciudad de Bolonia, en tanto Pierpaolo Bombardieri, líder de la UIL, participará en la que se extenderá desde la Plaza Mancini hasta la Plaza Matteotti, en la sureña urbe de Nápoles, precisa la fuente.
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