Cinco personas perdieron la vida ayer, tres de ellas de esa organización, luego de ser alcanzado el auto en el que viajaban por un bombardeo de un avión israelí cerca de la sureña ciudad de Khan Yunis.
El gobierno de Benjamin Netanyahu insiste en la política de asesinatos sistemáticos contra civiles desarmados y equipos de socorro internacionales, denunció el grupo.
Destacó que unos 230 de ellos murieron en el enclave costero en ataques israelíes desde el inicio de la nueva fase de violencia, en octubre de 2023.
El objetivo es aterrorizar a los trabajadores para evitar impedirles continuar con sus tareas humanitarias, afirmó.
En abril último, siete activistas de World Central Kitchen, incluido un estadounidense, un australiano y un británico, perdieron la vida en un incidente similar en la Franja, lo cual provocó una ola de criticas en el mundo.
Condenamos “la continuación de los graves crímenes israelíes y las violaciones deliberadas de todas las leyes y normas del derecho internacional humanitario, que proporciona protección especial a los trabajadores” en ese ámbito, recalcó.
El mundo debe presionar a Israel con el fin a obligarlo a terminar con la guerra en el enclave costero, apuntó.
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