«Desde luego que no», fue su respuesta tajante a los periodistas que le preguntaron al respecto, precisó la información publicada este domingo por el canal de Televisión Imedi 2.
Kobajidze también dio por inminente la próxima retirada de la presidenta Salomé Zurabishvili, que se declaró dispuesta a continuar en el cargo «hasta que haya un parlamento legítimo».
«Entiendo su estado emocional pero el día de la investidura, 29 de diciembre, tendrá que abandonar su residencia y cederla a un presidente elegido legítimamente», dijo el primer ministro.
En los comicios legislativos del 26 de octubre, el partido oficialista Sueño Georgiano logró 89 de los 150 escaños en el parlamento unicameral.
La variopinta oposición no reconoce la victoria de los sectores denominados euroescépticos, sus diputados se niegan a recibir credenciales y boicotean la nueva legislatura.
Desde el pasado jueves, después de que Kobajidze suspendiera hasta 2028 las negociaciones con la Unión Europea sobre el proceso de adhesión, los detractores del actual gobierno siguen con sus protestas frente a la sede del Parlamento en Tiflis.
Los manifestantes, a los que se unió en un momento la presidenta Salomé Zurabishvili, arrojan objetos contundentes y artefactos pirotécnicos a las fuerzas del orden que, a su vez, tratan de dispersar la multitud con cañones de agua y gases lacrimógenos.
Decenas de personas resultaron heridas y cientos fueron detenidas en los últimos días, al calor de violentas protestas en esta capital.
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