La máxima figura del Ejecutivo confirmó la intensificación de los esfuerzos internacionales desde ayer para frenar las infracciones israelíes y exigir la retirada de los militares de las ciudades fronterizas libanesas.
Según la cuenta en X del gabinete levantino, Mikati enfatizó la prioridad de estabilizar las condiciones para el regreso de los desplazados a sus ciudades y regiones, así como ampliar el despliegue del ejército en el sur.
El titular del gobierno destacó el anuncio de la dirección del ejército sobre la necesidad de reclutar soldados entrenados en unidades de combate con el propósito de mejorar el despliegue de las Fuerzas Armadas en varias regiones sureñas.
De acuerdo con la red panárabe Al Mayadeen, un pastor de ganado murió debido a una agresión israelí dirigida a la localidad de Janam, jurisdicción de Shebaa, en el distrito de Hasbaya.
El diario Al-Akhbar informó que excavadoras israelíes demolieron casas en el poblado sureño de Maroun al-Ras; mientras, una fuerza militar estacionada en Yaroun disparó ráfagas de ametralladoras medianas y ligeras hacia Bint Jbeil.
La propia publicación señaló que los bombardeos de artillería israelíes apuntaron a la llanura de Khiam y a las afueras de Rashaya Al-Fakhar.
A su vez, indicó que fuerzas de Tel Aviv comenzaron a retirarse de la zona de Chamaa después de avanzar hacia sus barrios orientales el domingo.
En este contexto, el comandante de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas (Unifil), teniente general Aroldo Lázaro, sostuvo un encuentro con la embajadora de Estados Unidos en Beirut, Lisa Johnson, y con el mayor general Jasper Jeffers, presidente del mecanismo de apoyo al cese de hostilidades.
Un comunicado de la Unifil, precisó que las partes abordaron los esfuerzos para ayudar a restablecer la estabilidad y el apoyo del personal de mantenimiento de la paz a la labor del mecanismo.
El comando de pacificadores expresó su compromiso con la Resolución 1701 de la ONU y con cualquier acuerdo que ponga fin a la violencia al otro lado de la Línea Azul, precisó la nota.
Las acciones hostiles israelíes aumentaron los temores del colapso de la tregua y llevó a los dirigentes libaneses, entre ellos el presidente del Parlamento, Nabih Berri, el primer ministro, Najib Mikati, y el comandante del ejército, general Joseph Aoun, a entablar consultas urgentes con las partes internacionales.
Más de 10 personas murieron en Líbano desde la entrada en vigor del alto al fuego el 27 de noviembre como consecuencia de cerca de 60 violaciones israelíes por tierra y aire.
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