La decisión fue aprobada por siete votos a uno durante la reunión de este miércoles del concejo, luego de una consulta con los vecinos.
Tres de las cuatro juntas que tienen jurisdicción sobre esa vía urbana acordaron retomar la antigua denominación de “Nueva Ñuñoa”, la cual estuvo vigente hasta 1959.
El edil Camilo Brodsky afirmó que “como concejal y descendiente de judíos me parece que no merece homenaje alguno un Estado que es hijo de una ideología como la sionista, que es colonialista, supremacista y comete en este momento un genocidio”. Mientras, la presidenta de la corporación, Alejandra Valle, señaló que no pueden ser indiferentes ante el dolor, cuando hay decenas de miles de niños muertos de las más horribles maneras, quedaron huérfanos o sufren hambre.
Por eso, agregó, hemos escuchado los distintos argumentos, tanto humanitarios como legales, porque no estamos haciendo un acto de reivindicación política ni ideológica, sino patrimonial al recuperar una antigua denominación local.
El abogado Luis Mariano Rendón, miembro de la iniciativa para el cambio de nombre de la calle, dijo que ni en Ñuñoa, ni en todo Chile, se le puede rendir un homenaje a Israel, cuando ha violado el ordenamiento jurídico internacional.
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