A través de un comunicado, el Ejecutivo se refirió a la posición de los Gobiernos de Guatemala, Costa Rica, República Dominicana y Panamá, y afirmó que desconocen la independencia y soberanía de los países del bloque en evidente servilismo a intereses extrarregionales.
Nicaragua rechazó los rasgos impropios de las culturas y deberes fraternales, en un mundo donde la ignorancia y la irresponsabilidad están dejando atraso y ocurrencias dolorosas a pueblos que claman por el derecho a vivir seguros, tranquilos y avanzando contra la pobreza impuesta.
“Negar el derecho de Nicaragua a ocupar el espacio que nos corresponde en la Secretaría General del SICA es injerencismo y negar al SICA mismo y condenarlo a su paulatina extinción por infuncionalidad y desintegración”, destacó el mensaje.
Añadió que no dudan que lo anterior sea de interés de los agentes foráneos, “que parecen dominar a quienes mantienen esas posiciones ajenas al interés supremo de nuestros pueblos”.
“Como Centroamericanos, donde la Historia nos ha unido en combates heroicos contra invasores extranjeros, nos pronunciamos y declaramos que no estamos condenados al fracaso”, enfatizó.
El texto, precisó que continuarán luchando para que la razón, la inteligencia, el intelecto y el interés de los pueblos se imponga y prevalezca el discernimiento que permitan unir esfuerzos por el Derecho de las Familias Centroamericanas a vivir de forma digna, y multiplicar las acciones que procuren afianzar concordia, seguridad y bienestar.
Asimismo, pidió abrir las mentes a la reflexión ante las realidades como el narcotráfico, el crimen organizado y la desunión que conlleva desarticulación y abre puertas al abuso, la explotación y el escarnio del saqueo inmisericorde de las riquezas patrimoniales.
“Que este mes de diciembre de hermandad y familia, abra las mentes a la reflexión sobre el valor de una patria centroamericana unida y fuerte, que defienda a nuestros pueblos de la extorsión y de todos los riesgos que vivimos y enfrentamos”, subrayó.
Agregó que este es un nuevo llamado a considerar el bien común, y desterrar la demencia que venden en forma de fantasías y pesadillas ególatras e infantiles y absurdos afanes de imposición y poder de unos sobre otros.
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