Según el director provincial de Salud, Apollinaire Yumba Tiabakwau, cerca de 382 personas con síntomas de la dolencia fueron identificadas en siete de las 30 áreas de salud de esta zona, a la vez que significó el rápido incremento en el número de fallecidos.
“Lo que reportamos del 10 al 25 de noviembre fueron 67 muertes. Ahora, cuando el equipo bajó ayer, en el camino encontraron un pueblo donde el equipo médico y la sociedad civil reportaron al menos 20 muertes. Y en otro pueblo que no fue contabilizado en el mismo período, encontraron al menos 40 muertos”, apuntó.
Esas cifras, más otras cuatro contabilizadas durante la jornada del miércoles, completaron las 131 personas fallecidas hasta la actualidad.
Yumba Tiabakwau se refirió a la labor de un equipo de expertos en epidemiología enviado por el gobierno provincial a Panzi, para intentar determinar la naturaleza de la enfermedad y proporcionar tratamiento.
Están todavía en el terreno, precisó, y agregó que están en proceso de toma de muestras para el análisis en el Instituto Nacional de Investigaciones Biomédicas (INRB), además de realizar labor de concientización para limitar el movimiento migratorio de la población.
El responsable de sanidad en la provincia dijo que el Ministerio de Salud anunció el envío de otro equipo al lugar para complementar y fortalecer el que ya está allí, así como para atender a los pacientes.
El pasado 3 de diciembre la dirección de Salud en Kwango lanzó la alerta sobre la nueva dolencia, que se caracteriza por fiebre, dolor de cabeza, tos, palidez y anemia, y hasta el momento los niños son los más afectados.
A la espera de tener respuestas, Yumba Tiabakwau llamó a la población a respetar las normas de higiene, no entrar en pánico y limitar sus movimientos de entrada y salida en esta zona sanitaria.
También pidió que se respetaran las medidas de barrera observadas durante la epidemia de Covid-19, en particular, no dar la mano, lavarse las manos regularmente y quedarse en casa si no se tiene nada importante que hacer fuera.
ga/kmg
