La sala Villena de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) acogió la última jornada del encuentro que sesionó durante tres días en La Habana.
Un diálogo entre la Dra Adele Newson-Horst, directora del departamento de inglés de la Universidad Estatal de Morgan, y la poeta, traductora y crítica literaria cubana Nancy Morejón, fue el centro del espacio, en el que se encontraban presentes Abel Prieto, presidente de Casa de las Américas, y Miguel Barnet, presidente de honor de la Uneac, además de intelectuales, creadores y académicos cubanos y norteamericanos.
Newson-Horst expresó lo significativo de esta iniciativa «para debatir sobre experiencias similares, dialogar sobre el daño provocado por el capitalismo a las clases bajas, a los negros y los inmigrantes hispanos».
Por su parte, Nancy Morejón destacó que «ha sido un intercambio académico importante entre las universidades de Morgan, de la Habana, y particularmente con la Uneac, sobre temas de identidad caribeña, de lo que ha sido la cultura negra africana en las Américas y cómo nos ha influido».
La presidenta de la Uneac, Marta Bonet, destacó la relevancia de celebrar el encuentro en la sede de la organización que representa la vanguardia de los escritores y artistas cubanos, y resaltó la amistad entre el Poeta Nacional Nicolás Guillén y Langston Hughes, a quienes siempre vinculó la necesidad de luchar por la igualdad y reivindicar el legado de los pueblos africanos.
En el encuentro se rindió homenaje póstumo al destacado periodista y escritor cubano Pedro de la Hoz, quien lideró la Comisión Aponte de la Uneac, dedicada a la lucha contra la discriminación racial y el legado cultural africano en Cuba.
DeWayne Wickham, decano emérito de la Facultad de Periodismo de la Universidad Estatal de Morgan, expresó que «este simposio ha brindado grandes oportunidades para encontrar terrenos comunes entre las comunidades negras norteamericanas, cubanas y de todo el Caribe».
De igual forma, dijo, permite crear nuevos espacios para luchar contra el bloqueo económico y financiero de Estados Unidos contra Cuba y también para seguir defendiendo la identidad cultural de todos los países de América. «Y es solo el comienzo”, enfatizó.
En la clausura del evento, el escritor y ensayista Abel Prieto resaltó que en Cuba la batalla contra la discriminación racial siempre contó con el respaldo del líder histórico de la Revolución, Fidel Castro.
También agradeció la presencia de intelectuales estadounidenses para dialogar sobre exclusión y racismo, flagelos que aún perduran en las sociedades actuales del mundo, según informó la Uneac.
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