“¡Enhorabuena a Francia por la impresionante restauración y reapertura de Notre Dame, un monumento al ingenio humano! Etiopía también aprecia y comparte profundamente el compromiso de Francia con los sitios patrimoniales!”, escribió la cartera de en su cuenta de la red social X.
La víspera, la catedral Notre-Dame de París reabrió sus puertas con adornos esencialmente de estilo gótico, en una ceremonia que atrajo a presidentes y personalidades de varios continentes.
Transcurrieron más de cinco años desde aquel fatídico 15 de abril del 2019, cuando un voraz incendio —cuyas causas siguen sin esclarecerse— estuvo a escasos minutos de destruir el templo declarado en 1991 por la Unesco Patrimonio de la Humanidad, testigo de acontecimientos como la Revolución Francesa y la coronación de Napoleón Bonaparte.
En la reinauguración, un documental recordó las imágenes del asalto de las llamas que derribaron la aguja de 93 metros de altura diseñada por el arquitecto autodidacta Eugène-Emmanuel Viollet-le-Duc, y las posteriores labores de reconstrucción.
Ante cerca de dos mil invitados, el presidente Emmanuel Macron expresó su gratitud a la nación francesa, en particular a los que salvaron y ayudaron de alguna manera a recuperar el templo.
Las piedras, la madera y los vitrales pudieron desaparecer, y nunca más hubiésemos escuchado las campanas de la catedral, advirtió.
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