«Es importante recordar que fue Ucrania quien rechazó las negociaciones y sigue rechazándolas.
Además, el mandatario ucraniano, Vladimir Zelenski, mediante un decreto, se prohibió a sí mismo y a su administración cualquier contacto con el liderazgo ruso. Su posición no ha cambiado», dijo Peskov.
Según el vocero, «para avanzar hacia una trayectoria de paz, a Zelenski le basta con anular este decreto y dar la instrucción de reanudar el diálogo basado en los Acuerdos de Estambul, teniendo en cuenta las realidades que se están configurando sobre el terreno».
La última ronda de conversaciones entre Moscú y Kiev para lograr un acuerdo de fin de las hostilidades se realizó el 29 de marzo de 2022 en la ciudad turca de Estambul, y desde entonces los países no han vuelto a retomarlas.
Moscú en repetidas ocasiones se declaró dispuesto a reanudar el proceso negociador con Kiev, pero lo condicionó a la cancelación del decreto ucraniano que prohíbe retomar las negociaciones con Rusia.
El pasado 14 de junio, Putin formuló varias condiciones clave para iniciar las negociaciones de paz, en particular, que Ucrania retire las tropas de cuatro nuevos territorios rusos, es decir, Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporozhie.
Igualmente que desista de adherirse a la Organización del Tratado del Atlántico Norte y mantenga el estatus neutral, no alineado y no nuclear, y que además se levanten todas las sanciones contra Rusia.
Zelenski, a su vez, rechazó la propuesta, calificándola de ultimátum.
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