La manifestación, encabezada por la Confederación Surcoreana de Sindicatos (KCTU) -una de las centrales sindicales más grandes del país-, se efectuó a las seis de la tarde (hora local).
La KCTU anunció que celebrará la vigilia en el mismo lugar todos los días, la cual supone una continuación de las protestas multitudinarias que llevaron a miles de personas a las calles durante el fin de semana.
Otro grupo cívico progresista, llamado Candlelight Action (Acción a la luz de las velas), también anunció planes para organizar una manifestación este lunes, exigiendo la destitución y el arresto inmediatos de Yoon.
Por otra parte, cerca de la plaza de Gwanghwamun, en el centro de Seúl, los grupos conservadores llevarán a cabo una concentración por separado, para protestar contra los intentos de destituir al mandatario surcoreano, y celebrarán protestas diarias hasta el sábado próximo.
El índice de aprobación de Yoon se ha desplomado hasta el 17,3 por ciento, registrando el nivel más bajo desde su investidura, en 2022, según una encuesta publicada este lunes por Realmeter.
El sondeo, encargado por una agencia de noticias local, fue realizado entre el jueves y el viernes de la semana pasada, entre mil 12 personas mayores de 18 años, y tiene un margen de error de 3,1 puntos porcentuales, con un nivel de confianza del 95 por ciento.
El líder del gobernante Partido del Poder del Pueblo (PPP), Han Dong-hoon, declaró la víspera que Yoon se mantendría alejado de los asuntos estatales, como la diplomacia, hasta que deje el cargo.
En un discurso nacional televisado el sábado, el jefe de Estado ofreció una disculpa pública por causar preocupación a la ciudadanía, debido a su orden de ley marcial, al tiempo que prometió no hacer otro intento de declararla nuevamente.
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