“Nuestros bomberos se exponían demasiado a las fuertes olas de calor que emana de acuerdo a la magnitud, al estado de los vientos (…), lo que hace el robot es llevar agua de dos camiones bomberos (…)”, aseguró el jefe de la Unidad de Innovación Tecnológica (UIT), capitán de navío Ernesto Adalid Alfaro.
Explicó el oficial en declaraciones a la Agencia Boliviana de Información que el ingenio tiene una capacidad de casi ocho toneladas del líquido refrigerante que puede disparar cerca de la línea de fuego, sin necesidad de la intervención humana.
Según la fuente, el prototipo de Elemento de Reacción Inmediata en Zona de Operaciones (Erizo), puede incursionar en áreas poco accesibles y realizar descargas precisas de agua desde 90 metros de distancia, con lo cual libera de riesgos a los recursos humanos.
Describió que al Erizo lo acompañarán dos camiones bomberos versátiles con capacidad de ocho toneladas de agua cada uno, listos para entrar a terreno boscoso e instalar módulos para luchar contra las llamas.
Sobre el robot, subrayó que es del tipo oruga y tiene tracción en las cuatro ruedas a las que los creadores denominan “4×4” todo terreno, porque puede ingresar en cualquier lugar dentro del monte para acercarse a las llamas.
Añadió que posee reflectores, una cámara GoPro y tiene todo automatizado, con un cerebro protegido por una carcasa de fibra de carbono resistente a temperaturas muy altas.
De su lado, el docente en la Escuela Marítima, ingeniero Daniel Mamani, agregó que este prototipo fue ensamblado con materiales reciclables y se caracteriza por su versatilidad y fuerza para atraer la manguera de 50 metros con carga de agua.
“Casi tiene una capacidad de poder arrastrar a una persona, su sistema de tracción es del tipo oruga, está compuesto por cuatro motores de corriente continua, la estructura es más metálica y la carcasa está compuesto por fibra de carbono (…)”, amplió el investigador.
Enfatizó en que en la confección del ingenio se empleó fierros desechados, mientras que las cadenas y poleas de motocicletas también son prácticamente materiales reutilizados, y lo único importado son los motores.
Informó Mamani que el ensamblaje de este prototipo duró unos 45 días en el Laboratorio de Robótica.
“La tecnología está bastante avanzada, la Unidad de Innovación Tecnológica de la Armada Boliviana está pensando (…) implementar tecnología de punta; el objetivo es minimizar el riesgo. Este tipo de robots entra en primera línea para no poner en peligro la integridad física de los bomberos”, concluyó el docente.
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