De acuerdo con el reporte, esta segunda cirugía es poco invasiva y es complementaria a la intervención realizada el martes.
«Como parte de la programación terapéutica, hará complementación de cirugía con procedimiento endovascular (embolización de arteria meníngea media)», explica la nota clínica.
El gobernante sigue en la Unidad de Terapia Intensiva, pero recibió visitas de familiares, caminó e hizo fisioterapia.
«Ha pasado el día bien, sin complicaciones», completa el documento. No hay previsión de alta hospitalaria, pero la expectativa es que Lula regrese a Brasilia a principios de la próxima semana.
Determinada literatura médica indica que el procedimiento endovascular es mínimamente invasivo e implica bloquear el flujo sanguíneo para evitar la expansión del hematoma.
El cuadro de Lula se deriva de la caída sufrida en octubre, en un baño del Palacio de la Alvorada, residencia oficial de la presidencia en esta capital.
Ese accidente doméstico causó un corte en la nuca del jefe del Ejecutivo, quien tuvo que llevar puntos de sutura. El episodio causó una hemorragia intracraneal, tratada ahora por las intervenciones.
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